Il 2 giugno si è tenuto presso la Residenza d’Italia il tradizionale ricevimento per commemorare la festa della Repubblica Italiana. Con l’occasione è stata presentata la partecipazione boliviana all’esposizione universale Expo Milano 2015.
Vedere il videomessaggio del Ministro degli Affari Esteri italiano, Federica Mogherini.
Ilustres invitados, queridos amigos todos,
muy buenas tardes y gracias por su presencia.
Quisiera darles, junto a mi esposa Idoia, un caluroso saludo de bienvenida a la celebración de la fiesta de la República Italiana.
En primer lugar permítanme saludar al Vicecanciller Juan Carlos Alurralde y al Viceministro de Comercio Exterior Clarems Endara: conocemos su intensa agenda y agradecemos enormemente su presencia.
Queridos amigos,
durante los últimos 12 meses, en Italia y en Europa se han intensificado los esfuerzos para salir de la crisis y se han definido políticas cuyo objetivo es la recuperación económica.
En Italia, el nuevo gobierno continúa con la reforma de nuestro sistema económico y las previsiones indican que a final del año saldremos de este largo ciclo recesivo. La recuperación económica debería ser definitivamente consolidada en el 2015.
Tras las últimas elecciones apenas celebradas para definir la composición del Parlamento europeo, a la cual seguirá dentro de unos meses la definición de la nueva Comisión, Europa está atravesando un importante período de transición. A partir del 1 de julio y durante todo el segundo semestre de este año, la Presidencia italiana de la Unión Europea tendrá que gestionar este delicado momento de transición. Lo hará con un programa dedicado básicamente a la recuperación de la demanda interna y del empleo. Además, con dicha Presidencia se pretende relanzar el proceso de integración, tras un largo periodo de crisis que ha evidenciado la necesidad de reflexionar acerca de algunos aspectos de la construcción europea.
En el ámbito internacional, la Presidencia italiana de la Unión Europea contribuirá a una relevante fase del debate acerca de la cooperación internacional frente a los desafíos globales. Me refiero en particular a las negociaciones en el marco de la ONU sobre 2 temas muy importantes: la agenda del desarrollo post-2015 y la lucha contra el cambio climático. Personalmente considero una coincidencia muy afortunada que Italia y Bolivia tengan las presidencias de dos grupos, UE y G-77, que son los principales actores de este debate.
La consolidada tradición de diálogo entre nuestros dos países es una garantía para la comunicación entre G-77 y la UE, aspecto este fundamental para el éxito de estos importantes procesos de negociación.
Señor Ministro (a nivel bilateral),
los últimos 12 meses han conocido un reforzamiento de las relaciones políticas bilaterales con la visita en septiembre del Presidente Morales al Presidente Giorgio Napolitano y la participación del canciller Choquehuanca a la sexta conferencia Italia – América Latina y Caribe, el pasado diciembre en Roma (además de otras visitas de miembros del gobierno boliviano en Italia). La reunión en Bolivia del mecanismo bilateral de consultaciones políticas que estaba programada para el mes de abril ha sido postergada por problemas de calendario, pero confío en que se pueda celebrar antes de final de año.
En un momento en el que continúa la reducción del empeño de la cooperación internacional en América latina, la cooperación italiana ha confirmado la prioridad de Bolivia entre sus países Partners. Nuestros objetivos no solo no se han reducido sino que han aumentado, con un portafolio de proyectos que, sumando los que ya se están realizando a los que están en proceso de negociación con el gobierno, superan los 80 millones de euros entre donaciones y créditos de ayuda. Este monto crece notablemente si se consideran también los proyectos y las iniciativas espontáneas de solidaridad que, aún sin la ayuda del gobierno italiano, siguen llegando al país. Creedme, considerado el momento de crisis que vive Italia, no es poco.
Además del valor económico de los proyectos, es aún más importante la experiencia y el conocimiento que llega a Bolivia gracias a nuestra cooperación, que no solo tiene como objetivo aliviar la pobreza, sino sobre todo establecer una relación entre socios con el fin de modernizar el país. Y ésta será la filosofía que Italia aplicará como Presidenta del Grupo de Donantes internacionales en Bolivia durante la segunda mitad del año.
En el sector económico, continúa el aumento del intercambio comercial bilateral. Italia está contribuyendo al proceso de diversificación productiva boliviana con la exportación de maquinaria para la elaboración de materias primas minerales y alimentarias. Al mismo tiempo, el aumento de los ingresos de las familias bolivianas permite a un mayor número de personas comprar productos Made in Italy, desde aquellos alimenticios a otros de diseño (y por supuesto los coches Fiat que como decía el año pasado, después del éxito que han tenido en Santa Cruz, han llegado también a Cochabamba y a La Paz). Por otro lado, Bolivia consolida sus exportaciones de materias primas a Italia, pero también comienza tímidamente a exportar productos semielaborados como testimonio del valor añadido que se quiere agregar a los recursos básicos nacionales.
Asimismo hay un interés creciente de las empresas italianas, que vuelven a Bolivia para ofrecer su tecnología en sectores como el petroquímico, la defensa, la energía y las telecomunicaciones.
Tras la aprobación de la ley de Inversiones, que considero solo un primer paso hacia la estimulación de la inversión privada nacional y extranjera, estoy convencido de que Bolivia podría beneficiarse enormemente de una promoción más amplia de sus productos y de las oportunidades de inversión existentes. Como he dicho en diversas ocasiones al Presidente Morales, sería necesario hacer ya un mayor esfuerzo, tanto por parte del gobierno como por la de los empresarios privados, para promocionar un país todavía poco conocido en Europa y, en general, en el extranjero.
Una extraordinaria oportunidad de promoción turística, cultural y económica para Bolivia, viene de la mano de su participación en la Expo Universal del 2015 en Milán, sobre la que habéis podido ver una presentación en los televisores. Se trata de un evento global muy importante que tendrá una participación oficial record de 147 países y que se prevé sea visitada por 25 millones de personas, entre las cuales, espero, muchos bolivianos. Pensad qué oportunidad extraordinaria para Bolivia que 25 millones de personas, venidas de todo el mundo, visiten su stand.
La Expo en Milán, como reza su slogan, “Nutrir el planeta, energía para la vida”, tendrá como tema central el desafío de la seguridad alimentaria. Bolivia se ha adherido inmediatamente a la Expo 2015 y ha desarrollado un diligente trabajo de preparación para la elaboración del proyecto de un stand nacional muy lindo, dedicado principalmente a la quinua, en el pabellón temático de los cereales y tubérculos. El proyecto conceptual y el diseño del stand, que es de Gastón Ugualde, han sido considerados por los organizadores en Milán un ejemplo para el resto de los países que participan en los pabellones temáticos. Ha sido muy fácil trabajar con Bolivia en lo referente a su participación y quiero agradecer al Viceministro de Comercio exterior Clarems Endara, que es además Comisario General de Bolivia en la Expo, por la colaboración que ha brindado hasta ahora. Permitidme también que agradezca a tres de los sponsors italianos y extranjeros de la Expo 2015, que son presentes en Bolivia: Illy Café, Samsung Electronics y Fiat-Chrysler.
Queridos amigos,
es la cuarta vez que pronuncio el discurso de la celebración del día nacional de mi país en Bolivia. Y es también la última. Próximamente, aunque todavía no tengamos fecha, Idoia y yo regresaremos a Roma (la ciudad de “La Grande Bellezza”), regresaremos tras 8 años en el extranjero, para retomar el contacto con un país que cambia velozmente, y, de ese modo, estar preparados para representarlo en nuestro próximo destino.
Para nosotros han sido casi 4 años muy lindos. Creo que inevitablemente actuaremos como representantes honorarios de Bolivia en Italia, intentando transmitir el entusiasmo que ha caracterizado nuestra experiencia de vida aquí. Hemos sido tratados con mucho cariño y dejamos muchos amigos, especialmente en La Paz. Estoy seguro que Bolivia continuará siendo parte de nuestra vida, también después de nuestro regreso a Roma.
Tras casi 4 años aquí, quisiera también decir, con el máximo respeto hacia el Gobierno, que pienso que ha llegado el momento para una mayor apertura de Bolivia hacia Italia, hacia Europa y hacia el mundo. Este País cambia rápidamente, pero también el resto del mundo lo hace. Espero que, dejando de lado ciertos prejuicios ideológicos, herencia del pasado, y mirando al futuro, ambos procesos de cambio puedan ser convergentes: Italia y Europa están listas para multiplicar las oportunidades de colaboración con Bolivia.
Para finalizar quisiera agradecer en primer lugar a mi esposa Idoia, incomparable compañera de vida, que ha compartido tantas alegrías y alguna que otra dificultad durante nuestra experiencia aquí.
Permitidme también agradecer, como es oportuno en esta ocasión, a todos los colegas de la Embajada de Italia, de la Oficina de la Cooperación Italiana y de los Consulados Honorarios, así como a los voluntarios de las ONG laicas y católicas, internacionales y locales, y a todos los compatriotas que cotidianamente, con su solidaridad y empeño, contribuyen a reforzar los lazos entre nuestros países.
Muchas gracias a todos, arrivederci, y espero que disfruten.
Amb. Luigi De Chiara